
Inaugura Juárez Departamento de Ingeniería Vial
MONTERREY, NL., 15 de julio de 2025.- El carril de contraflujo implementado en la avenida Morones Prieto podría convertirse en una medida permanente para reducir la congestión vehicular en uno de los puntos más críticos de la zona metropolitana de Monterrey.
Así lo confirmó el alcalde Adrián de la Garza, quien calificó como positiva la respuesta ciudadana tras el primer día de prueba de esta estrategia vial, misma que se seguirán evaluando con base en los resultados que arroje su uso.
El edil informó que ya se encuentran en pláticas con el municipio de Guadalupe para analizar la viabilidad de extender el carril hacia ese territorio.
De acuerdo con sus declaraciones, la incorporación de Guadalupe podría hacer mucho más eficiente el flujo vehicular entre ambos municipios, al permitir que los automovilistas aprovechen mejor la infraestructura durante las horas pico.
Aunque aún está en fase de prueba, de la Garza dejó claro que se seguirán realizando adecuaciones y monitoreos para evaluar su efectividad antes de decidir si se implementa de manera definitiva o se cancela.
Esta iniciativa surge como respuesta a una problemática que ha ido en aumento: el tráfico vehicular que afecta diariamente a miles de ciudadanos del área metropolitana de Monterrey.
De acuerdo con estimaciones recientes de organismos como el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) y SinTráfico, la congestión vial provoca la pérdida de más de 190 millones de horas hombre cada año, lo que se traduce en pérdidas económicas que superan los 12 mil millones de pesos anuales.
Además del impacto económico, los largos traslados están afectando la calidad de vida de los regiomontanos. El tiempo promedio que un conductor pasa en el tráfico alcanza hasta 116 horas al año, ubicando a Monterrey entre las ciudades más congestionadas de América Latina.
En transporte público, los trayectos pueden extenderse hasta tres horas, lo que duplica los tiempos comparados con el automóvil particular. Esto no solo genera estrés y desgaste físico, sino que también reduce el tiempo disponible para la vida familiar y personal.
El proyecto del carril de contraflujo en Morones Prieto se perfila como una medida emergente que podría aliviar de forma parcial esta situación. Sin embargo, las autoridades locales reconocen que su permanencia dependerá de los resultados que se obtengan durante su fase de prueba.
Agregó que en caso de no alcanzar la eficiencia esperada, la medida será retirada para dar paso a otras alternativas, y es que la implementación de este tipo de estrategias refleja la urgencia con la que debe atenderse el problema de movilidad en Nuevo León.