Ver el mundo como un niño: clave para aprender más, dice psicóloga

MONTERREY, NL., 30 de abril de 2025.- La psicoterapeuta con enfoque conductual y contextual, Lizeth González, explicó la importancia de una buena salud mental en los menores y las repercusiones que esto genera en la adultez.
Ante ello, la especialista en conducta, señaló que la manera en que las personas se expresan o incluso acciones cotidianas como abrir la puerta, como saludar, como hablar, se aprenden desde la infancia.
“Si un niño no está bien, si un niño no se siente tranquilo con lo que está sucediendo o no se siente a gusto con quien es, obviamente va a ir evolucionando esta conducta y de forma adulta va a ir escalando. Un niño que a lo mejor no sepa qué hacer cuando las cosas no salen como quiere, cuando se le quiebra un juguete y no le enseñamos a lidiar con esta emoción que no es placentera, puede llevar a tener adultos que ante el más mínimo contratiempo exploten”, ejemplificó la psicóloga.
En vista de esto, resaltó que es importante explicarles a los niños lo que sucede de un modo que les resulte comprensible y no desde la altura de los adultos. Así mismo, también explicó que muchos tienden erróneamente a recurrir a estas acciones o a acortar la explicación puesto que se piensa que los niños no razonan igual que un adulto.
“Los niños sí entienden, los niños son muy inteligentes y mucho de lo que me encuentro en sesión es que a veces a los niños no se les da la seriedad que les corresponden”, apuntó.
Ya que, la falta de explicación, podría llevar a los menores a efectuar su propia interpretación en la cual, muchas veces, asumen culpas que no le competen y deciden que algo debieron haber hecho mal para desencadenar aquella situación.
“A veces estamos estresados y no queremos explicarles a los niños cuando están en su época de ‘pero ¿por qué esto? ¿Por qué otro?’. Es una duda genuina, los niños no saben por qué, nosotros sí porque ya somos adultos. Entonces, tenemos que tratar de estar disponibles para llevar esta información”.
La psicóloga explicó que si los adultos vieran el mundo a través de los ojos de un niño, es decir, desde la exploración, la curiosidad y la apertura a recibir nuevas experiencias, aprenderían muchas cosas.
“Es increíble la capacidad con la que un niño te puede explicar su mundo si lo escuchas realmente. Si dejamos esta atmósfera adultocentrista, si nos ponemos a su altura y vemos el mundo a través de sus ojos, vamos a aprender muchísimas cosas”, finalizó la especialista.