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MONTERREY, NL., 24 de junio de 2025.- En un intento por mejorar la eficiencia del transporte público y reducir los tiempos de espera, el Gobierno de Nuevo León aprobó un nuevo esquema de pago a los transportistas, basado en el número de pasajeros y la distancia recorrida, es decir, por kilómetro recorrido por pasajero.
La medida fue avalada el pasado lunes 23 de junio por la Junta de Gobierno del Instituto de Movilidad y Accesibilidad, luego de que se reconociera el fracaso del modelo anterior, implementado en 2023, que pagaba a los concesionarios únicamente por kilómetro recorrido sin considerar la cantidad de usuarios transportados.
“El riesgo demanda lo asume el Gobierno del Estado, lo que ha implicado una erogación millonaria sin resultados efectivos”, se señaló en la sesión del IMA. El esquema anterior requería supervisar más de 3 mil 300 autobuses, casi 5 mil operadores y 180 contratos administrativos, sin mejoras notables en la calidad del servicio.
Además, se evidenció que las unidades no son propiedad ni del Estado ni de los concesionarios, lo que ha generado falta de interés en su conservación. Con el nuevo esquema, los transportistas podrán ejercer una opción de compra sobre los autobuses, lo cual, se espera, aumentará su compromiso con el mantenimiento y la vida útil de las unidades.
El nuevo modelo busca generar incentivos para transportar más pasajeros, reducir la evasión del pago del pasaje, optimizar recorridos y reconectar el sistema con la demanda real de los usuarios. También se pretende evitar el despilfarro de recursos públicos y hacer más sustentable la operación del sistema.
La migración hacia este modelo iniciará de inmediato y se prevé que concluya hacia finales de 2025.
El Gobierno estatal anunció que no habrá incremento en las tarifas del transporte público a corto plazo. La Secretaría de Finanzas y Tesorería General del Estado destinará recursos para subsidiar el arrendamiento de las unidades, lo cual permitirá mantener los precios actuales para los usuarios.
Este ajuste forma parte de la reestructura de movilidad iniciada en marzo de 2023, aunque ahora con un enfoque más centrado en la calidad del servicio, la eficiencia operativa y la experiencia del ciudadano.